Por Harris Castillo.-Julio Cury, es un reputado
abogado y periodista dominicano. Dos profesiones que dentro de sus afinidades
comparten la de la investigación como herramienta fundamental, cuando se quiere
ejercer con ética.
El Dr. Cury, ex asesor del ex presidente Hipólito
Mejía, conoce además otra herramienta básica
para la buena investigación, se llama método de la investigación. Pero es además
el periodista Cury, un profesional al que no se le conoce afinidad con las mañas
de la política barata, aunque uno nunca sabe de las deudas o favores de nadie.
Nos extraña entonces un supuesto Twit
firmado bajo su cuenta en esa red social, que da cuenta de los rumores que
pudieran estar ligando al senador por San José de Ocoa Carlos Castillo, en la investigación judicial
por el escándalo sobre sobornos en la compra realizada por el gobierno
dominicano a la empresa brasileña Embraer, de los aviones súper Tucanos.
Una investigación superficial del tema,
deja fuera de debate la participación del senador Castillo en dicha operación.
Los Tucanos fueron contratados en una visita del ex presidente Leonel Fernández
a Brasil en el año 2007, y aprobado por el senado el empréstito de
financiamiento de los mismos por algo más de noventa y dos millones de dólares en
Noviembre del 2008. Carlos Castillo ocupó su curul senatoria en Agosto del
2010. Si hubo soborno, ya estaban pagos.
Ni en cabeza indocta cabe creer, que una
sardina de mar isleño le va a quitar de las fauces la carnada a los jureles del océano palaciego.
La factoría de rumores de la provincia, a
pesar de su capacidad de destrucción y cuaquierizacion del ejercicio político,
carece del vuelo para llegar a la esfera del doctor Cury y ponerlo a hablar, si
es su cuenta real de twiter, sobre un tema que en el contexto que se expone, podría
desacreditar su capacidad profesional
por obviar las herramientas básicas antes mencionadas. Claro que el periodista
se cuida de hacer señalamientos y más bien aconseja y advierte lo prudente de
las aclaraciones.
No salen del aeropuerto de Rancho Arriba,
un proyecto que habrá que emprender pronto y por el que llamaron loco por
visionario al Ing. Robinson Báez, los Súper Tucanos que buscan pista de
aterrizaje en el segmento anencefálico de quienes actúan bajo la filosofía de
que “el fin justifica los medios”. Esos aviones están despegando de pistas
mejor localizadas, probablemente de alguna a la que el periodista Cury no puede
rechazar el despegue o donde alguna vez el doctor Cury haya necesitado o crea
necesitar en el futuro, aparcar su propia nave. Claro, si es su cuenta real de
twiter.
El senador Castillo debiera agradecerle a
Cervantes su heredad de buen augurio: “nos ladran Sancho, señal de que
avanzamos”
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