En una de las decisiones más aplaudidas, con motivo del 16 de agosto o la conmemoración de la restauración de la republica, el presidente Leonel Fernández destituyó al jefe de la policía, Rafael Guillermo Guzmán Fermín.
Varios sectores de la sociedad habían pedido públicamente la destitución de Guzmán Fermín, por considerar que los derechos humanos eran violados por la institución de manera frecuente.
Es de esperar que el nuevo incúmbete, el general José Polanco Gómez, enfrente la alta criminalidad que azota el país, con métodos profesionales, respetando los derechos de la ciudadanía
era tiempo ya de que se fuera ese criminal , ladron y narcojefe.
ResponderBorrarsi en nuestro pais hubieran leyes este criminal ampon iria del cargo a los tribunales y luego a las rejas.